Lamentablemente aquel lunes trágico y siniestro una parte de su arquitectura fue consumida por el fuego,  la bóveda colapsó, siendo ésta la zona más afectada,  sin embargo,  el rosetón norte construido en el siglo XIII, el cual, representa a la virgen María resistió.  Asimismo, milagrosamente, se ha salvado la escultura de “La Piedad”, del artista francés Nicolás  Coustou, ubicada en el altar mayor de la catedral, cabe mencionar, que  su construcción fue ordenanza del rey Luis XIV, en el siglo XVIII, en ella se representa el cuerpo de Cristo en brazos de la virgen María tras su descenso de la cruz del calvario. Entre las primeras reliquias rescatadas del incendio hallamos la corona de espinas de Cristo.  Este devastador siniestro ha ensombrecido París y el corazón de muchos admiradores y fieles, quiénes, en vísperas de la sagrada semana santa, tuvimos que ver horrorizados como ardía uno de los patrimonios culturales y religiosos más importantes del mundo.  Sin embargo, no es la primera vez que el edificio sufre ante la ferocidad del fuego, en varias ocasiones fue abrazada por las llamas, durante la revolución francesa y la comuna de París por ejemplo,  y de entre las ruinas emergió restaurada para volver a brillar y encantar a los observadores.